El Querétaro volvió a jugar frente a un chileno tras las brutales agresiones

Los hechos de violencia desatada en el Estadio La Corregidora hace una semana en el encuentro entre Querétaro y Atlas dieron la vuelta al mundo. El partido estaba a favor de la visita cuando las peleas en las tribunas se desplazaron a la cancha y a los alrededores sin que la policía interviniera, en lo que es considerado el bochorno más grande en la historia de la Liga MX.

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Las sanciones después de lo ocurrido determinó que los dirigentes del Querétaro fueran expulsados e inhabilitados de cualquier cargo en el fútbol mexicano, el partido se dio por finalizado con un 3-0 a favor del Atlas y el club deberá ser vendido en los próximos doce meses. Los hinchas no podrán ir a los partidos de visita por seis meses, mientras que el grupo de animación en la barra no podrá asistir a los estadios por los próximos tres años.

Con esas medidas llegó el primer encuentro para los "Gallos Blancos" después de las brutales agresiones y fue ante Necaxa en Aguascalientes con una derrota por 1-0. En el duelo participó desde el primer minuto Angelo Araos, pero fue sustituido en el minuto 57.

Hoy más que nunca, #UnidosSomosMásFuertes ⚽️ #GritaXLaPaz pic.twitter.com/lGneJDkMz1

Al salir al terreno de juego, ambos equipos compartieron un lienzo que rezaba: "unidos somos más fuertes", en el que además de los jugadores, figuraban los jueces, mujeres y niños. Con el triunfo el equipo del ex Universidad de Chile se instaló en la duodécima posición con 11 puntos, mientras que el Querétaro es 15° con sólo ocho unidades.